Reproducción médica asistida
Todos merecen la oportunidad
de ser padres.
Sea cual sea el momento que estés viviendo, ¡podemos ayudarte!
Tienes menos
30
años
Sabes que tenemos la mayor tasa de embarazo clínico en Italia por embrión transferido en fresco en mujeres menores de 35 años.
Tienes entre
35-44
años
La edad de la mujer tiene un fuerte impacto en su fertilidad y en la calidad y cantidad de sus ovocitos; pero en el CFA registramos una tasa de éxito casi del doble respecto a la media italiana, para mujeres de entre 40 y 44 años.
Ya has intentado con la
Reproducción médica asistida
¡No te rindas!
Son muchas las parejas que llegan al CFA después de numerosos ciclos de FIV fallidos en otros lugares. Esto nos ha permitido desarrollar una gran experiencia que nos ha llevado a tener las tasas de éxito más altas en Italia para estos casos.
En la expresión «Fecundación Asistida» se encierra todo el sentido profundo de esta técnica.
¿Qué hacemos cuando emprendemos un tratamiento de reproducción médicamente asistida aquí en el CFA?
Nada más que «asistiros» y acompañaros hacia el logro de vuestro sueño; nada más que ayudar a vuestras células sexuales (espermatozoides y ovocitos) a encontrarse, creando todas las condiciones óptimas para su desarrollo.
Ofrecemos programas de RMA personalizados e integrales, que se basan en sus características específicas y que involucran todos los aspectos que podrían afectar vuestras posibilidades de concepción: desde la nutrición hasta la psicología, desde la medicina hasta la biología.
Les ayudaremos a conseguir un embarazo y a dar a luz a vuestro deseado hijo, poniendo en práctica todas las herramientas que la ciencia prevé para ayudar a la naturaleza a realizar vuestro sueño.
Nuestros servicios
- Estimulación ovárica
- IU
- Inseminación intrauterina
- IMSI
- FIVET
- ICAI
- AZH
- PICSI
- PGD
- Acupuntura
- Congelación de gametos y embriones
- TESE
En la expresión «Fecundación Asistida» se encierra todo el sentido profundo de esta técnica.
¿Qué hacemos cuando emprendemos un tratamiento de reproducción médicamente asistida aquí en el CFA?
Nada más que «asistiros» y acompañaros hacia el logro de vuestro sueño; nada más que ayudar a vuestras células sexuales (espermatozoides y ovocitos) a encontrarse, creando todas las condiciones óptimas para su desarrollo.
Ofrecemos programas de RMA personalizados e integrales, que se basan en sus características específicas y que involucran todos los aspectos que podrían afectar vuestras posibilidades de concepción: desde la nutrición hasta la psicología, desde la medicina hasta la biología.
Les ayudaremos a conseguir un embarazo y a dar a luz a vuestro deseado hijo, poniendo en práctica todas las herramientas que la ciencia prevé para ayudar a la naturaleza a realizar vuestro sueño.
Nuestros servicios
¿Está pensando en embarcarse en una FIV? El primer paso es reservar una consulta con nuestros profesionales. De hecho, siempre hay que recordar que cada historia es única y, por lo tanto, se invita a cada paciente individual -así como a cada pareja- a contar su historia y sus objetivos, para que juntos podamos evaluar qué pasos dar para un proceso de FIV totalmente personalizado.
Con una simple muestra de sangre en el laboratorio podemos realizar un análisis hormonal, es decir, controlar los niveles hormonales en sangre. Mediante este examen podemos detectar posibles desequilibrios hormonales, comprender la causa e intervenir con los remedios adecuados.
La ovulación se controla mediante una serie de ecografías transvaginales y tiene una doble función:
✔ porun lado, sirve para comprobar que se produce la ovulación
✔por otro lado, es útil para aumentar las posibilidades de concepción a través del coito dirigido.
Esta prueba es esencial para todas las parejas que deciden planificar un embarazo, pero también para las mujeres que se someten a terapias de inducción de la ovulación.
El espermiograma es una de las primeras pruebas de laboratorio a las que se somete un hombre cuando se sospecha infertilidad en una pareja. Es una prueba diagnóstica útil para analizar el líquido seminal y evaluar su calidad, el número de espermatozoides, su forma y su motilidad. Hay que decir que el espermiograma es útil no sólo para diagnosticar el estado de infertilidad, sino también como exploración para prevenir posibles patologías.
Llevar una dieta adecuada puede beneficiar nuestra fertilidad. Una dieta equilibrada y un estilo de vida saludable ayudan tanto a las mujeres como a los hombres a cuidar su fertilidad. De hecho, no es casualidad que el enfoque holístico de la FIV, característico de nuestro CFA, incluya también consultas personalizadas con nuestra nutricionista, cuyos consejos acompañan a las parejas a lo largo de todo el proceso de maternidad.
La histeroscopia es un procedimiento endoscópico para diagnosticar patologías de la cavidad uterina. El examen se realiza en el ambulatorio y consiste en observar el interior del útero a través del histeroscopio, equipado con una pequeña cámara, que permite detectar malformaciones del útero o la presencia de pólipos, miomas o tumores. La histeroscopia es muy útil para conocer las causas de una posible infertilidad, por lo que suele recomendarse a las mujeres que desean embarcarse en una FIV.
La criopreservación de esperma masculino es un procedimiento mediante el cual se recogen gametos masculinos y se conservan en una instalación especial que contiene nitrógeno líquido durante un periodo prolongado de tiempo para poder descongelarlos y utilizarlos en técnicas de fecundación asistida. La criopreservación del semen puede ser de interés para pacientes sometidos a terapias contra el cáncer que pueden comprometer la fertilidad con el tiempo, pacientes con enfermedades que pueden provocar azoospermia, o incluso pacientes que desean preservar la paternidad futura sin arriesgarse a perder la función testicular debido a acontecimientos imprevistos que pueden ocurrir a lo largo de la vida.
La transferencia embrionaria es quizá el momento más importante del proceso de fecundación asistida: representa la intervención mediante la cual el embrión se traslada literalmente del laboratorio al útero de la mujer. La transferencia de embriones es un procedimiento muy delicado, pero que no debe preocupar al paciente. Dado el estrés psicológico que conlleva el miedo a ver fracasar el intento y, por tanto, el propio sueño, sugerimos a nuestros pacientes que se queden en el CFA después de la intervención para relajarse durante una hora y descansar un poco. Tras el traslado no es absolutamente necesario permanecer en cama, pero el consejo es reanudar las actividades cotidianas evitando esfuerzos físicos excesivos, fuentes de estrés y manteniendo una dieta sana.
En la IIU, el líquido seminal, tras una recogida adecuada, se procesa en el laboratorio para obtener el mayor número posible de espermatozoides móviles y morfológicamente normales en un pequeño volumen de medio de cultivo, libre de plasma seminal, leucocitos y bacterias. A continuación, los espermatozoides se transfieren directamente a la cavidad uterina, mediante el uso de un tubo fino de plástico blando (catéter), unas horas antes de la ovulación. De este modo, permitimos que los espermatozoides atraviesen la barrera que puede suponer el moco cervical (es el caso de la esterilidad cervical) y se acerquen a los ovocitos.
La inseminación intrauterina es un procedimiento bastante sencillo, pero con una utilidad limitada en el tratamiento de la infertilidad. Generalmente se realiza para el tratamiento de parejas con infertilidad masculina de leve a moderada, factor cervical y en casos de infertilidad inexplicada (idiopática). Para que la técnica sea aplicable, la foliculogénesis debe ser regular y una o ambas trompas deben ser permeables. La inseminación puede realizarse en un ciclo espontáneo o mediante una terapia hormonal suave.
En el ovario de una mujer, normalmente sólo un ovocito alcanza la madurez en cada ciclo. Sin embargo, para maximizar las posibilidades de embarazo, es necesario obtener más de un ovocito mediante estimulación ovárica. Nos permite, mediante la administración de determinados fármacos, estimular la producción de varios ovocitos y garantizar su buena calidad. Antes de determinar el protocolo más adecuado, nuestro equipo evalúa de forma competente y discreta numerosos factores femeninos, como el perfil hormonal, las características físicas y la edad. Sólo tras análisis en profundidad se identificarán los fármacos que deben administrarse, que, de hecho, pueden variar de una mujer a otra tanto en cantidad como en tipo.
Para la estimulación ovárica se utilizan principalmente tres fármacos de tipo hormonal:
1. Gonadotropinas
2. Agonistas y antagonistas de la GnRH
3. La hCG
La estimulación ovárica se realiza mediante inyecciones subcutáneas diarias que pueden durar una media de 10 a 14 días.
El ciclo espontáneo se produce sin medicación durante el proceso de ovulación. La ventaja del ciclo espontáneo es que se evita a la paciente el estrés y las molestias causadas por la estimulación ovárica. Sin embargo, es necesario someterse a ecografías y controles hormonales frecuentes para seguir el desarrollo folicular hasta la ovulación y poder programar una extracción de ovocitos.
La fecundación in vitro, combinada con transferencia de embriones (FIV), se utilizó clínicamente por primera vez hace más de 40 años; desde entonces, más de diez millones de niños han sido concebidos mediante esta técnica. La fecundación in vitro es un procedimiento de Procreación Médicamente Asistida de Nivel II destinado a aumentar las posibilidades de éxito de la concepción en parejas en las que otras terapias de fertilidad han fracasado o no son posibles.
Tras la estimulación hormonal, los ovocitos obtenidos se extraen del ovario (pick-up) y se ponen en contacto directo con los espermatozoides, que a su vez han sido convenientemente preparados y seleccionados. Así, gracias a la FIV, el ovocito es fecundado en el laboratorio, en condiciones óptimas para su fecundación y desarrollo; a continuación, el embrión que se habrá formado será transferido al útero
de la mujer. Fivet se utiliza sobre todo:
– tras repetidos fracasos con inseminaciones intrauterinas
– en caso de trompas de Falopio impermeables
– en casos de infertilidad masculina de leve a moderada.
La fecundación heteróloga es una técnica de procreación médicamente asistida que se aplica a parejas en las que uno o ambos miembros han sido diagnosticados de infertilidad permanente, lo que hace insuficiente la fecundación homóloga. En los gametos heterólogos, uno de los gametos (o incluso ambos) no pertenece a la pareja, sino a donantes externos completamente anónimos.
IMSI, inyección intracitoplasmática de espermatozoides morfológicamente seleccionados, nos permite seleccionar los espermatozoides morfológicamente mejores, utilizando un microscopio de gran aumento, sin tinción y en tiempo real. Numerosos estudios demuestran que la técnica ICSI combinada con la selección espermática de alta magnificación permite un mayor éxito y un mayor índice de embarazo, especialmente en los casos en que las alteraciones espermáticas se asocian a un alto índice de fragmentación del ADN.
La técnica IMSI permite en algunos casos una mejora de los resultados en el caso de:
– ICSI sin fecundación;
– en ausencia de implante;
– en presencia de teratozoospermia grave;
– en presencia de una elevada fragmentación del ADN;
– y probablemente también en la infertilidad idiopática.
La ICSI, utilizada por primera vez en 1992, es una técnica de fecundación asistida que ha revolucionado el tratamiento de la infertilidad masculina en los últimos años, dando a los hombres con bajo recuento de espermatozoides la oportunidad de ser padres.
Con esta técnica, que utiliza equipos sofisticados, el espermatozoide único se inyecta directamente en el ovocito.
Se aplica la ICSI:
– tras repetidos fracasos con la FIV
– en caso de endometriosis
– en presencia de esterilidad masculina grave y semen y/u ovocitos congelados
Para maximizar las tasas de éxito, la mujer se somete a una estimulación hormonal (inducción múltiple de la ovulación) para reclutar el mayor número posible de ovocitos.
Es un procedimiento microquirúrgico que se realiza en embriones para aumentar las posibilidades de implantación y embarazo. Normalmente, el embrión, tras alcanzar la fase de blastocisto, debe salir de la envoltura que lo rodea, conocida como zona pelúcida, para implantarse en el útero y empezar a recibir oxígeno y nutrientes de la madre. La AZH se utiliza para diluir la zona pelúcida del embrión mediante láser antes de la transferencia al útero. De este modo favorecemos que el propio embrión arraigue en la pared uterina.
Se recomienda:
– en mujeres en edad reproductiva avanzada (>38 años)
– cuando los niveles de hormona foliculoestimulante (FSH) son especialmente altos el tercer día
– en caso de fracaso repetido de las técnicas de fecundación in vitro
– cuando, simplemente, es visible una zona pelúcida engrosada en el embrión.
La donación de óvulos consiste en que una mujer done óvulos a otra. Esta técnica de fecundación asistida se lleva a cabo en el más absoluto anonimato, para respetar la intimidad tanto de la donante como de la receptora. Optar por la donación de óvulos es un acto de gran sensibilidad, ya que permite a muchas parejas hacer realidad su sueño. De hecho, muchas mujeres tienen problemas con sus óvulos debido a enfermedades, tratamientos como la quimioterapia o la radioterapia, o a la edad, y hoy, afortunadamente, pueden recurrir a la donación de óvulos. Pueden donar óvulos las mujeres jóvenes y sanas a las que no se hayan diagnosticado enfermedades hereditarias en su familia. La donación de óvulos es un regalo, un gesto de solidaridad, mediante el cual se puede hacer felices a muchas mujeres que desean un hijo a toda costa.
La donación de esperma es un acto voluntario que permite a los hombres donar su esperma para que pueda ser utilizado en técnicas de fecundación asistida, ayudando así a muchas parejas que no pueden tener hijos. La donación de esperma, al igual que la de óvulos, se realiza de forma totalmente anónima y no antes de que el paciente se haya sometido a una serie de pruebas genéticas para evitar el riesgo de enfermedades hereditarias. El propio semen se somete a un periodo de cuarentena en el que se garantiza que no haya enfermedades de transmisión sexual.
La técnica denominada congelación total ha surgido como alternativa a la transferencia de embriones frescos (TE) durante los ciclos de fecundación in vitro (FIV). Este procedimiento consiste en la congelación completa de ovocitos o embriones, sin transferencia. Posteriormente, tras el ciclo menstrual (o varios ciclos menstruales), los embriones congelados se transfieren a un ciclo natural o a un ciclo artificial.
La doble estimulación o DuoStim es cuando se realizan dos estimulaciones y dos extracciones de ovocitos durante un mismo ciclo menstrual en las fases folicular y lútea. El protocolo DuoStim es especialmente eficaz en mujeres en las que es necesario optimizar la reserva ovárica, como las pacientes oncológicas o de edad avanzada.
TESE, Testicular Sperm Extraction (o biopsia testicular) consiste en la extracción de espermatozoides testiculares mediante un microscopio. Gracias a esta técnica, se puede intentar la recuperación de espermatozoides en casos de azoospermia, es decir, la situación en la que no hay espermatozoides en el eyaculado. Los espermatozoides que se recuperan con este tipo de intervención pueden utilizarse en técnicas de fecundación asistida.
La donación de óvulos y la donación de esperma son acciones totalmente anónimas que hombres y mujeres pueden llevar a cabo para dar a otras parejas la oportunidad de procrear. Las donantes se someten a una serie de pruebas para descartar enfermedades hereditarias y de transmisión sexual antes de realizar las técnicas de fecundación heteróloga.
Al decidir embarcarse en una FIV, ambos miembros de la pareja necesitan apoyo psicológico. De hecho, no hay que subestimar el efecto que puede tener el estrés, no sólo ante posibles fallos, sino también durante todo el periodo de exámenes y tratamientos al que uno se somete antes del traslado. En el CFA, nuestros pacientes reciben apoyo profesional desde la primera consulta hasta la realización de su sueño de ser padres.